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El neonazi que acosó a Óscar Puente agredió a tres policías y dio una paliza a un hostelero

El propio Puente compartía una serie de capturas de las redes sociales de Burgueño en las que se podía apreciar que, además de ser una persona violenta con antecedentes penales, el acosador al que varios medios de comunicación blanqueaban a primera hora de la mañana, profesa también una ideología neonazi

En la mañana del viernes, cuando se subía al AVE en Valladolid en dirección a Madrid, para participar del debate de investidura, el diputado del PSOE Óscar Puente sufrió el acoso y el intento de intimidación por parte de un pasajero con actitud violenta. Puente tuvo que llamar a la Policía para que los agentes se ocupasen del acosador y el tren sufrió un retraso de unos minutos.

En un primer momento, y siguiendo una operativa que es lamentablemente habitual, muchos medios de comunicación decidieron adoptar una posición de equidistancia, utilizando palabras como «incidente», «altercado» o «rifi-rafe», repartiendo así la responsabilidad entre el acosado y el acosador y, de este modo, justificando y blanqueando al segundo.

El asunto fue adquiriendo tal dimensión mediática que, poco a poco, se empezaron a conocer informaciones adicionales sobre la persona que intentó intimidar a Puente.

De nombre Lucas Burgueño, El Español de Castilla y León publicaba al punto de la tarde que «Lucas Burgueño y otro hombre, cuyas iniciales son M.S.B., abordaron y agredieron a un conocido hostelero de Valladolid a las 03.25 horas del 13 de mayo de 2022» y que «tras reprocharle M.S.B. un incidente ocurrido en el pasado, se desató «una discusión verbal, en el curso de la cual ambos le han agarrado y le han golpeado en la cara y propinado patadas en los genitales y abdomen»».

Según el mismo medio, «la sentencia detalla que los agresores pasaron del ataque verbal al físico, momento en el cual el hostelero recuerda que «intenté defenderme cubriéndome la cara como podía». Es por esto por lo que el hostelero se llevó la mayor parte de los golpes en manos y brazos, que le provocaron «erosión en muñeca y 5º dedo de la mano izquierda, tumefacción en falange distal de dedo anular de mano izquierda con dolor en falange media y proximal del 5º dedo»».

Y continúa la crónica: «no acabó ahí la cosa. A causa de las patadas puñetazos de Lucas y su acompañante, este hombre tuvo «una erosión en la zona nasal izquierda y eritema en mejilla izquierda, dolor abdominal y en región genital, hematomas, inflamación en cara interna de muslo derecho de 5 centímetros de diámetro y dolor en región inguinal derecha, para cuya curación precisó de una primera asistencia médica sin posterior tratamiento médico o quirúrgico»».

Por su parte, El Norte de Castilla recoge otro incidente en el cual Lucas Burgueño participó de la agresión a tres policías locales. Según relata este medio, «fue detenido hace apenas dos semanas por increpar a tres policías locales que estaban fuera de servicio y lanzar a uno de ellos un vaso, ocasionándole un corte profundo en la palma de la mano izquierda por el que tuvo que recibir cuatro puntos de sutura». Al final de la crónica, se señala la curiosa elección de las menciones que hizo Burgueño al subir a Instagram el vídeo en el que acosaba al diputado del PSOE: «la publicación —en la que ha etiquetado a las cuentas de Partido Popular, Vox, Desokupa, Alvise Pérez y Pérez Reverte, entre otros— acumulaba 148 ‘me gusta’ y 67 comentarios».

El propio Puente compartía en su cuenta de X (antes Twitter) una serie de capturas de las redes sociales de Burgueño en las que se podía apreciar que, además de ser una persona violenta con antecedentes penales, el acosador al que varios medios de comunicación blanqueaban a primera hora de la mañana, profesa también una ideología neonazi.