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Pedro Sánchez en la sesión de investidura — Alejandro Martínez Vélez / Europa Press

Feijoó reprocha a Sánchez su presunto «feminismo» mientras cesa a Irene Montero

Lo que toda España se pregunta es si la amnistía sería hoy una realidad si Sánchez no lo requiriese para su investidura.


Tras las manifestaciones en Ferraz de los últimos días y las amenazas vertidas por la derecha y la ultraderecha contra la investidura del líder socialista, se esperaban días tensos en las cercanías del parlamento español. El primer día la llegada de los diputados socialistas y Sumar se recibió con abucheos y pancartas. Recordemos que entre las medidas de seguridad que se han impuesto para la protección de la sede de la soberanía nacional, se ha destinado a más de 1600 agentes que rodearon el Congreso.

Sánchez comenzó el debate de investidura reconociendo a los manifestantes que salieron pacíficamente contra la formación de gobierno

Sánchez comenzó el debate de investidura reconociendo a los manifestantes que salieron pacíficamente contra la formación de gobierno. Y afirmando que reanudará el camino de 2014 en reconocimiento del estado palestino, también recordó el apoyo a Ucrania: “España ha recuperado peso internacional porque es un socio más fiable”

En el plano nacional afirmó que “La derecha está siendo colonizada y arrastrada por los reaccionarios”. Citando a Antonio Gramsci el presidente en funciones exclamó: “En momentos de cambio intenso se libra una gran contienda entre una opción reaccionaria y una opción progresista” “O avanzamos, o retrocedemos”. Habló del neoliberalismo en pasado, como si fuese algo superado. También destacó el daño que ha producido en el mundo. “Los profetas del odio que quieren encerrar a las mujeres en la cocina, a las personas LGTBI en armarios, y a los migrantes en campos de refugiados”

Habló de Inglaterra como ejemplo de la ineficacia del neoliberalismo y el fanatismo de derechas con el Brexit y Liz Truss. “Los partidos de extrema derecha se han expandido gracias a los partidos de la derecha tradicional”. El candidato a la investidura repasó las “medidas desastrosas de la derecha” entre gritos y abucheos de los diputados de PP y VOX. Sánchez objetó: “El problema no era que el estado era grande o pequeño, central o autonómico; el problema es que no lo ocupaban ellos”.

Entre las medidas estrellas que planteó para la legislatura que llega anunció la gratuidad del transporte público para jóvenes. A continuación, llegó el momento que todo el hemiciclo esperaba: el anuncio de la amnistía que dará posibilidad a la formación de Gobierno con el apoyo de Junts y ERC. “En el nombre de España, en el interés de España, en defensa de la concordia entre españoles, vamos a conceder una amnistía a las personas encausadas por el Procès catalán”. Lo que toda España se pregunta es si la amnistía sería hoy una realidad si Sánchez no lo requiriese para su investidura.

El turno de Feijóo no se hizo esperar y su tono elevado, oponiéndose a la investidura, marcó el discurso de la derecha: el popular acusó al candidato socialista de ejercer «corrupción política» añadiendo que “la investidura nace de un fraude. A usted la historia no le amnistiará».

Nuñez Feijóo reprochó a Sánchez que jactarse de feminista mientras mantiene el veto a Irene Montero: «¿Es el Gobierno más feminista y va a cesar usted a la ministra de Igualdad?» exclamó mientras la ministra en funciones se mostraba incómoda en el escaño.

En medio la tensión cabía lugar a cierto desenfado, tanto es así que tras citar Sánchez un verso de Antonio Machado “Hoy es siempre todavía” el popular Feijóo respondía: “Diga completa la cita de Antonio Machado. ¿Hasta en las citas miente usted?”. “Usted omite: Y ahora es el momento de cumplir las promesas que nos hicimos. Esta es la cita completa” respondió.


Madrid –

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