Actualidad

Óscar Puente compara aprobar la amnistía con ‘casarse de penalti’

El titular de la cartera de Transportes ha admitido hacer una comparación “chusca”

El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, ha sorprendido a propios y extraños con la forma en la que ha justificado la aprobación de la Ley de Amnistía con los votos del PSOE. 

Él mismo ha advertido que iba a hacer una comparación “chusca” antes de preguntar de forma retórica: “¿Usted se hubiera casado si no se hubiera quedado embarazada su mujer? Pues a lo mejor en este momento no, pero nos queremos mucho y seguramente dentro de seis meses nos hubiéramos casado también”. 

Así, Óscar Puente, ex alcalde de Valladolid, ha señalado que la amnistía “era necesaria para llegar a un acuerdo, pero también para la convivencia en Cataluña y, por tanto, puede que no se hubiera hecho en este momento, pero sin duda se hubiera hecho a lo largo del mandato”. 

Después de comparar la amnistía con ‘casarse de penalti’, el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible ha subrayado el firme compromiso del Gobierno con la lucha por la igualdad y frente a la violencia ejercida contra las mujeres. Lo ha hecho en un acto que ha tenido lugar en Madrid y en el que se ha firmado la ampliación del Programa Horizonte de Ineco contra la violencia de género.

Óscar Puente y el presidente de la ingeniería pública de Transportes, Sergio Vázquez Torrón, han rubricado este programa junto a las asociaciones beneficiarias: Asociación MUM – Mujeres Unidas contra el Maltrato, Fundación Mujeres, Asociación Eslabón y Asociación Victoria, en un acto que ha tenido lugar en el marco de la conmemoración del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres.

Este programa, cuyo objetivo es sensibilizar y acompañar en su acceso al mundo laboral y educativo a las mujeres, hijos y huérfanos que lo sufren, es una iniciativa pionera para ayudar a salir del ciclo de la violencia de género a las víctimas: acompaña a las víctimas en su salida al mundo laboral, dándoles oportunidades y mostrándoles que hay un mundo y una sociedad a la que pertenecen y que no tienen nada que ver con la pesadilla que están sufriendo.