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El capo mediático de VOX, Julio Ariza, condenado a pagar 4,5 millones por Intereconomía Televisión

Ariza ha sido condenado culpable por el concurso de acreedores, condenado al pago de 4,5 millones e inhabilitado

Como tantos otros miembros de VOX, Julio Ariza es una escisión del PP. Pero su marcha fue pionera, ya que fue en el momento que más poder tenía el PP, en 1996. Él era uno de esos cuadros políticos del PP catalán que dirigía Alejo Vidal-Quadras y que abandonó la formación azul cuando Aznar pactó con Jordi Pujol. A partir de ese momento Ariza se lanzó a impulsar un grupo de comunicación con una agenda ultranacionalista, religiosa y conservadora al estilo de Rupert Murdoch que dio lugar al Grupo Intereconomía, plataforma sobre la que creció la escisión de Abascal del PP y que ha sido muy próxima a la línea del PP que encarna Esperanza Aguirre. De Intereconomía Televisión han sido muy famosos los programas de El Gato al agua o Punto pelota, que marcaban la línea política de ultraderecha para llevar a postulados más reaccionarios al PP. Tras el cierre de la cadena, su lugar lo ocupa ahora dentro del grupo El Toro TV, un canal de TDT que viene a ser un clon del anterior y en el que participa a menudo Julio Ariza, que se define a sí mismo como “empresario, comunicador y humanista”.

La sentencia llega en un momento en el que el capo mediático de VOX, es acusado por Macarena Olona de ser el jefe en la sombra de la formación de Abascal

Ayer, viernes 3 de noviembre, Ariza, presidente del grupo, ha sido condenado “al pago de 4.492.011,31 euros al empresario Julio Ariza Irigoyen, patrón mediático de Vox, por su gestión de Intereconomía Televisión”, según informa Miguel González en El País. La sentencia del Juzgado de lo Mercantil número 11 de Madrid también ha inhabilitado dos años a Ariza para administrar bienes ajenos. La sentencia llega en un momento en el que el capo mediático de VOX, es acusado por Macarena Olona de ser el jefe en la sombra de la formación de Abascal. Gabriel Ariza, su hijo, posee junto a Kiko Méndez Monasterio, asesor de Abascal, la empresa Tizona Comunicación que ha recibido millones de euros de la formación ultra. Tal y como informa El País, “la sentencia explica que Intereconomía Televisión se encontraba en una situación de insolvencia, con impago reiterado de las obligaciones tributarias, en el cuarto trimestre de 2013(…) Sin embargo, demoró la declaración de concurso de acreedores, a la que estaba obligado por ley, hasta julio de 2015, lo que provocó que la situación económica de la sociedad se siguiera deteriorando hasta acumular un pasivo de 44,8 millones. Por eso, el juez condena a su administrador único, Julio Ariza Irigoyen, al pago de casi 4,5 millones”.

Julio Ariza ha sido una de las personas que ha estado en la órbita del PP. De hecho, durante los años de la quiebra de su televisión, reclamó a Rajoy que cumpliera con “las cosas que prometía en las frecuentes entrevistas en nuestra Casa”. Pese a ello Rajoy no hizo nada de lo que pidió Ariza para llevar a cabo la expansión del grupo y a lo que el entonces presidente se comprometió, tal y como cuenta El Plural, basándose en el libro de Enrique De Diego. Ariza le recordó entonces a Rajoy que “durante el Gobierno de Zapatero, su grupo mediático “constituyó un núcleo de oposición y resistencia social y política que llegó a conseguir más de un 90% de notoriedad de marca en todo el territorio español” y lo que es más importante, apoyó a Rajoy “cuando sus amigos de La Razón o Antena 3 disfrutaban de un pacto bien engrasado con Teresa Fernández de la Vega”, escribía en 2013 El Plural. La vinculación de Ariza con Esperanza Aguirre y con Rodrigo Rato, que era apoderado de una de las empresas propietarias del grupo, no fue suficiente para contar con el apoyo de Rajoy para salvar la cadena.

El vínculo de Ariza con Aguirre se remonta como poco hasta 2003, el famoso año del Tamayazo. Tal y como contó la Cadena Ser en 2007, Ariza “organizó la protección de los tránsfugas Eduardo Tamayo y María Teresa Sáez hasta que consumaron su traición al PSOE en la Asamblea de Madrid. El ex escolta de Ariza ha señalado a la Cadena SER que días antes del 10 de junio de 2003 su jefe le ordenó participar en la vigilancia de ambos diputados y que participó en el traslado y protección de los tránsfugas una vez se ausentaron de la Cámara regional e impidieran la investidura de Rafael Simancas en beneficio de Esperanza Aguirre”. José María Calzada, el escolta de Ariza, reconoció a la emisora del Grupo Prisa que “ estuvo en el equipo que trasladó y ocultó a los tránsfugas en una ocasión: el 27 de junio de 2003, 17 días después de que los diputados se ausentaran de la Asamblea de Madrid”.