Plataforma Libertad 6 de Zaragoza — Twitter (X)
La Plataforma ‘Libertad 6 de Zaragoza’ lanza una recogida de firmas para reclamar al Gobierno un indulto a los jóvenes antifascistas condenados
Este caso de persecución política y montaje policial puede acabar con cuatro jóvenes antifascistas en prisión durante cuatro años y nueve meses por manifestarse contra VOX
La Plataforma Libertad 6 de Zaragoza lanzó el miércoles una recogida de firmas para apoyar una solicitud de indulto al Gobierno de España para los cuatro jóvenes antifascistas condenados a cuatro años y nueve meses de prisión por el Tribunal Supremo. Los otros dos detenidos eran menores por lo que se les juzgó en otro procedimiento.
Los sucesos por los que se les juzgan ocurrieron en enero de 2019 cuando el movimiento antifascista se organizó contra un acto de VOX en Zaragoza y acabó con varios policías heridos, desórdenes públicos y seis jóvenes detenidos.
La detención de los seis jóvenes se dio en un bar de los alrededores de la ciudad universitaria de Zaragoza, lugar donde se habían dado los enfrentamientos entre manifestantes y Policía. De forma aleatoria detienen a seis jóvenes, que no se conocían entre sí, y comienzan cinco años de juicios y acusaciones un tanto dudosas.
En primer lugar, el atestado policial fue tan exacto y concreto con las características de los jóvenes detenidos que hace sospechar que se realizó una vez los tenían detenidos para ajustar los perfiles detenidos a los del atestado. A la vez que este atestado y la declaración de los agentes policiales sirvieron al juez de primera instancia de la Audiencia Provincial de Zaragoza para resolver el caso e imponer dos penas máximas de tres años cada una por desórdenes públicos y atentado contra la autoridad a los cuatro jóvenes antifascistas, el juez rechazó el video de una cámara de seguridad de la Universidad de Zaragoza (UNIZAR) como prueba que inicialmente presentó el responsable de seguridad de la UNIZAR como testigo para inculpar a los jóvenes y que se retiró porque el video no probaba “nada”, ni aparecían ninguno de los seis jóvenes detenidos y que las defensas de los acusados intentaron que se pudiese utilizar como prueba defensora de que en el momento que se les acusa de ambos delitos, ellos no estaban presentes en ese lugar.
Tras esta sentencia, los 6 de Zaragoza recurrieron al Tribunal Superior de Justicia de Aragón (TSJA) con un peritaje de expertos en imagen cinematográfica del video que en primera instancia no les dejaron presentar como prueba, que confirmaba que los jóvenes encausados no se encontraban en el lugar y momento de los hechos que se les acusaban y por el que se les había condenado a seis años de prisión. El juez del TSJA vuelve a rechazar esta prueba e incrementa un año de pena de cárcel, con una condena de siete años de prisión a cada uno.
Finalmente, los jóvenes antifascistas recurrieron al Tribunal Supremo que hace unas semanas dictaminó una sentencia rebajada a cuatro años y nueve meses de prisión para los encausados, ya que consideró que los dos delitos por los que se les acusa se cometieron en concurso ideal y, por lo tanto, se deben juzgar como un mismo hecho y no por separado como hasta entonces se les había enjuiciado.
Actualmente solo les queda una vía judicial, recurrir al Tribunal Constitucional, vía que van a agotar pero, como comentó el padre de uno de los jóvenes en El Tablero, no les induce a pensar que vaya a dictaminar a su favor y absolverles de los delitos que se les acusa.
Por esta razón, la Plataforma Libertad 6 de Zaragoza ha lanzado una recogida de firmas para apoyar la petición de indulto al Gobierno a razón de que las condenas que se les ha aplicado vulneran el derecho a manifestación.
Montaje policial y criminalización del antifascismo.
Este caso es otro ejemplo más de montaje policial donde se dan por válidas las pruebas y declaraciones de la Policía sin ponerse en tela de juicio e investigar si las argumentaciones tienen veracidad frente a los argumentos y demostraciones de los encausados que, o se les deniegan las pruebas que puedan presentar o simplemente su testificación tiene menor grado de validez que la de un policía. Casos de montajes policiales hay decenas en el Estado español, no es ni el primero ni, tristemente, será el último, casos como el de Alfón, Dani Gallardo, los jóvenes de Alsasua, No Caso 14N, o la Operación Pandora, son algunos ejemplos de esto.
Todos con un mínimo común múltiplo, son jóvenes u organizaciones antifascistas que padecen la represión de un estado “plenamente democrático” mediante persecuciones judiciales cimentadas sobre montajes policiales. Las víctimas de esta represión no son únicamente las que lo padecen en sus propias carnes, esto tiene mucho más que ver con la criminalización de un posicionamiento político tan legítimo y democrático como es el antifascismo. Aquellas que se involucran o militan en la actualidad en estos espacios están avisadas, dejadlo, podéis ser las siguientes. Para las que vengan en un futuro, tienen la advertencia realizada a través de casos, juicios y/o sentencias de lo que puede suponerlas participar en movimientos antifascistas.
Madrid –
