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Eduardo Parra / Europa Press

Si BlackRock se hace con el 20 % de Naturgy, alcanzará los 24.000 millones invertidos en 20 de las 35 empresas del Ibex

Con la última operación, el fondo buitre concentrará en sus manos gran parte del control de sectores económicos claves para nuestro país


Tras el anuncio el pasado viernes de que Black Rock se haría con el fondo de inversión en infraestructuras GIP por 11.413 millones de euros y por tanto, de sus acciones y participaciones en Naturgy (antigua Gas Natural), se calcula que la compañía estadounidense podría pasar a controlar tal cantidad de capital y poder en sectores clave de nuestra economía que sería, de facto, un actor principal e indispensable con enorme influencia en el IBEX 35.

De materializarse la adquisición de la parte de Naturgy contralada por GIP (la mayor operación de este tipo en nuestro país en los últimos diez años) Blackrock sería el tercer accionista de la gasística, lo que acumularía a su ya de facto primer puesto en el accionariado de Repsol y el segundo en Iberdrola detrás del fondo soberano catarí QIA. A ello se le sumarían sus participaciones en Enagás y en Redeia, así como las acciones que controla en Banco Sabadell, Banco Santander y BBVA. Con todo ello, la entidad sería accionista de 20 de las 35 empresas del IBEX 35 español, acaparando un poder sin precedentes en la economía de nuestro país.

El ejecutivo de Pedro Sánchez, que dice estar «estudiando» la operación, se ha topado con las críticas de quienes la consideran un peligro democrático: “A los buitres se les mira cara a cara” afirmaba en X la exministra Irene Montero.

El ejecutivo de Pedro Sánchez, que dice estar «estudiando» la operación, se ha topado con las críticas de quienes la consideran un peligro democrático: “A los buitres se les mira cara a cara” afirmaba en X la exministra Irene Montero: «Si los buitres quieren tomar el control y ponen en riesgo la democracia, España debe profundizar la intervención en este sector estratégico y crear una energética pública”. Tanto Podemos como Sumar, socio de Gobierno, han pedido a Sánchez que se ampare en la ley antiOpas para frenar este movimiento, ya que dicha norma obliga a que el Ejecutivo tenga que autorizar una operación que implique la adquisición de más de un 10 % del capital de empresas estratégicas de nuestro país, como sería el caso en Naturgy.

Algunos medios, como 5Días, calificaban ya de «bronca» la situación o afirmaban que el Gobierno estaba «en guardia» ante la noticia (como apuntaba El Confidencial) o que el asunto se había «politizado», en palabras de El Economista, si bien desde las páginas salmón de PRISA daban por hecho la luz verde de Sánchez a la compra si se mantenía el status quo dentro de la compañía energética. El devenir de los acontecimientos será la primera gran puesta en escena del recién estrenado Ministro de Economía, Carlos Cuerpo, tras la salida de Nadia Calviño hace apenas un mes.


Madrid –

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