Diario Red
Menu
Menu
Diario Red

El presidente Pedro Sánchez ingresando al Hemiciclo del Congreso — Jesús Hellín / Europa Press

Viene en su manual

En el momento en que se produce la “humana decisión” de poner distancia, el presidente del gobierno y su partido habían perdido la iniciativa política, la agenda la marcaba la cloaca mediática y su corrupto Partido Popular


Pedro Sánchez, profundamente conmocionado por la apertura de diligencias de investigación contra su mujer, Begoña Gómez, por parte del Magistrado Juan Carlos Peinado, escribió una carta a la ciudadanía para darse cinco días de reflexión por si merecía la pena continuar al frente del gobierno y de su partido. La denuncia en cuestión, como se ha reconocido por el propio denunciante, se fundamenta en noticias falsas, fabricadas en los tabloides financiados por los gobiernos autonómicos y municipales en los que participan VOX y el Partido Popular.

En el momento en que se produce la “humana decisión” de poner distancia, el presidente del gobierno y su partido habían perdido la iniciativa política, la agenda la marcaba la cloaca mediática y su corrupto Partido Popular, dando un paso más en el deterioro de las instituciones. Se sumaba a la usurpación del gobierno de los y las jueces la utilización del Senado, confrontándolo al Congreso de los Diputados en la finalidad de paralizar la acción legislativa y con ello la del gobierno. Los ministros y las ministras de la coalición gubernamental se mostraban, así mismo, incapaces de contrarrestar lo que es común y consustancial al bipartidismo, esto es, la corrupción política y económica. El y tú más había vuelto, sustituyendo el buen trabajo del gobierno de coalición en el que participó Podemos, sin duda, la mejor etapa de cambio real, a mejor, de la historia democrática española. 

Este, en síntesis, era el escenario político. Con un gobierno de coalición a la defensiva y con las encuestas en contra. Sumar, presa del abrazo del oso, agotado su discurso, en descomposición y perdiendo respaldo popular en favor de Podemos, según la última encuesta del CIS, no aportaba nada. Es entonces cuando, Pedro Sánchez, suelta la carta en la que sin nombrar para nada la lawfare, de la que, tanto se ha beneficiado cuando se trataba de acabar con Podemos, sus dirigentes, con el vicepresidente Pablo Iglesias, con la ministra de igualdad, Irene Montero y con la vicepresidenta del gobierno valenciano, Mónica Oltra. Ahora dice estar consternado por el despiadado ataque a su mujer, como medio para acabar con él, razón, por la que, se tomaba un respiro. Y, todo gira, las cloacas quedan descolocadas, nadie de la progresía mediática niega la existencia de lawfare, que hay jueces y policías que se prestan a ello, que hay “periodistas” mafiosos que trabajan para falsos medios de comunicación y que el Partido Popular es parte de lo que llaman la máquina del fango.

No es nueva la reacción del resistente. Hay un paralelismo y viene en el manual de resistencia. Lo encontramos bajo el epígrafe “El descanso americano”. Es ahí donde figuran las preguntas: ¿qué hacer?, ¿volver a la política? ¿Dedicarme a otra cosa?, si bien, ahora reformuladas en ¿merece la pena? Él, nunca tuvo la intención de irse, sino dar la vuelta a la tortilla, esta vez, utilizando el poder que le da ser presidente del gobierno. Era mucho lo que había en juego, además, de haber pasado a la historia como el tonto útil, dicho en términos políticos, que entregó gratis el poder a la derecha reaccionaria, resquebrajando, de paso, al PSOE.

Las reacciones del apoyo mediático, la arenga al sentimiento y a la movilización, en especial de su partido, el tono, el sentido y la calma en las intervenciones de los y las dirigentes del PSOE, de sus ministros (los de Yolanda Díaz fueron ignorados) son indicios que, en contra de lo que se dice, señalan que no lo hizo solo. Metafísicamente es imposible. Fue planeado y en ello participaron algunas personas de confianza de su círculo político, que trasladaron a otros el argumentario, también participaron dirigentes de la llamada progresía mediática, que movilizó a sus comunicadores estrella, algún que otro dirigente empresarial, el silencio de este sector y de la bolsa son otras de los axiomas que nos indican que solo no tomó la decisión y, por supuesto, lo habló con Begoña. Al que parece que no informó, con detalle, es al sexto de los Felipes, obviamente. El resultado ha sido magnífico, aparentemente. Hasta García Page ha hincado la rodilla.

La cuestión es que sabe que ha quedado definitivamente expuesto. Se ha obligado a tomar medidas reales de regeneración democrática. Derogar la mordaza e indultar a las personas condenadas al albur de esa nefasta Ley, tramitar la Ley de medios de comunicación que garantice una información veraz, acabando con la impunidad de los apócrifos medios y sus falsos periodistas y, renovar el CGPJ, quiera el PP o no. Si no lo hace, todo habrá quedado en una gran mentira, una más y, el resultado será demoledor. Esto es de primaria.  


Madrid –

Nada de esto sería posible sin tu ayuda

Y únete a nuestros canales de Telegram y Whatsapp para recibir las últimas noticias

Compartir

Editorial

  • Sánchez, Ferreras y ‘la máquina del fango’

    La entrevista de ayer con Ferreras es el cierre del asunto. Es el apretón de manos con el jefe de los mafiosos que garantiza su impunidad. Una terrible noticia no solamente para la salud del debilitado sistema democrático español sino también para el conjunto de la profesión periodística