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Manu Levin en La Base

El poder mediático ecuatoriano se degrada para defender el asalto a la Embajada de México

El culpable de la crisis diplomática entre Ecuador y México desatada por el asalto a la embajada ordenado por Noboa es, según los democráticos y ecuánimes grandes medios de comunicación ecuatorianos, de Rafael Correa


“El presidente Daniel Noboa ha hecho respetar al país ante la descarada injerencia del gobierno mexicano del presidente López Obrador. Bien hecho, presidente!”.

¡¿“Injerencia del gobierno mexicano de López Obrador”?! ¡Pero si ha sido Noboa, presidente de Ecuador, quien ha ordenado asaltar una embajada extranjera! ¿Qué mayor “injerencia” hay que asaltar por la fuerza una embajada de otro país? Nada, nada. “Bien hecho, presidente”, que “ha hecho respetar al país” (aunque hoy todo el mundo vea que Noboa ha situado a Ecuador fuera del derecho internacional). Estas palabras las tuiteó el periodista Carlos Jijón, peso pesado del poder mediático ecuatoriano (fue Director Nacional de Noticias de Ecuavisa, Vicepresidente Nacional de Noticias de Teleamazonas, Defensor del Lector y Editor Político del diario Hoy, editor ejecutivo de la revista Vistazo, director del diario La República y después portavoz del Gobierno de Guillermo Lasso).

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Y podríamos decir que las palabras de Jijón apoyando el atropello cometido por el gobierno de Ecuador en su asalto a la embajada de México resumen la que está siendo la posición y el papel cómplice en todo este escándalo del poder mediático concentrado de Ecuador. Vamos, que los grandes medios de comunicación de Ecuador, esos que dicen que “vigilan al poder”, están todos defendiendo la flagrante ilegalidad, que incluso podría constituir un casus belli con México, cometida por el presidente Noboa. Y lo están haciendo con todo tipo de “argumentos” cada cual más estrambótico que el anterior. Vamos a repasar algunos de ellos.

Primer “argumento”: en el extranjero solo están protestando los rojos de mierda.

Titular de El Universo: “Gobiernos de Izquierda censuran entrada de policías a la Embajada de México en Ecuador para apresar a Jorge Glas”.

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“Gobiernos de izquierda”, claro; como, por ejemplo, el de Uruguay, Paraguay, Estados Unidos, Reino Unido, Bélgica, las autoridades de la UE, la OEA o incluso el gobierno de Javier Milei en Argentina, que han condenado el asalto a la embajada de México en Ecuador. Todos ellos conocidos gobiernos comunistas, por supuesto… ¿En El Universo se creen que la gente es idiota? Degradación absoluta del poder mediático ecuatoriano para defender la violación del derecho internacional perpetrada por Daniel Noboa, con mentiras descaradas como esta de El Universo: “Gobiernos de izquierda censuran el asalto a la embajada”.

Y no es solo cosa de El Universo, por supuesto. Veamos el segundo “argumento” que están esgrimiendo los medios en Ecuador para defender el asalto a la embajada: “en el interior de Ecuador pasa lo mismo, quienes protestan también son solo los rojos de mierda. Ah, y los indígenas. No la gente de bien”.

Titular de El Comercio, que reproduce a su vez una nota de la Agencia EFE: “Correísmo e indígenas cargan contra Noboa por detención de Glas en la Embajada de México”. 

“Cargan contra Noboa”. Así que tras el asalto por la fuerza a una embajada ordenado por Daniel Noboa, resulta que los que “cargan” —un verbo que significa precisamente un asalto militar o policial— son los demás contra Noboa, que fue quien ordenó la carga. El mundo al revés.

Continúa El Comercio: “Más de doce horas después de la irrupción de la Policía de Ecuador a la Embajada de México para detener a Jorge Glas, exvicepresidente de Rafael Correa, las condenas a este acto dentro de la esfera política ecuatoriana parten prácticamente solo del correísmo y del movimiento indígena, mientras casi todos los líderes y fuerzas de derecha y centro guardan silencio”.

Pues si esto es algo que les molesta a los indígenas y los rojos, y no una violación del derecho internacional condenada por todo el mundo, pues bien hecho está, ¿no? ¡Que asalten más embajadas! ¡Que se joda Correa y los indígenas!

Ese es el mensaje: que lo que ha hecho Noboa no es algo que colisione con las normas más elementales del derecho internacional, sino algo que colisiona con las ideas, con las opiniones, de un determinado sector político interno y de los “gobiernos de izquierda”. Y entonces, pues que se jodan.

Tercer “argumento” del poder mediático ecuatoriano para defender la infamia: la crisis diplomática la han provocado todos menos quien ha ordenado asaltar la embajada provocando una crisis diplomática sin precedentes.

Por ejemplo, el propio Jorge Glas, secuestrado en la embajada de México como un terrorista y encerrado en una prisión de máxima seguridad: “Jorge Glas, el exvicepresidente y alfil de Correa que elevó crisis entre Ecuador y México”. O sea, que el culpable de “elevar la crisis” es la víctima del secuestro. Curioso razonamiento.

“Las personas secuestradas por el monstruo de Amstetten elevan la crisis entre el monstruo de Amstetten y los tribunales”, ¿se imaginan? El culpable es la víctima, Jorge Glas, y por elevación… La culpa es de Rafael Correa.

Sujétame el cubata. El culpable de la crisis diplomática entre Ecuador y México desatada por el asalto a la embajada ordenado por Noboa es, según los democráticos y ecuánimes grandes medios de comunicación ecuatorianos, de Rafael Correa, que está exiliado y no gobierna desde 2017.Titular de Ecuavisa, una de las principales televisiones de Ecuador: “El correísmo desata otra crisis diplomática”.

Ecuavisa siempre fue una televisión de línea conservadora, lo cual es legítimo. Pero ver en lo que se ha convertido (un medio de cloaca que ha abandonado todo rigor periodístico para convertirse en un aparato de propaganda y fake news capaz de informar sobre el asalto a la embajada de México titulando “el correísmo desata otra crisis diplomática”), es triste y lamentable, y señala el que es el espíritu de época en relación con las prácticas de la derecha mediática a nivel internacional. El virus de la FOX y los hechos alternativos, hasta el tuétano. Por algo los medios ecuatorianos solo son creíbles, en estos momentos, para un 38% de los ecuatorianos y ecuatorianas.Eso sí: a los directores de Ecuavisa se les ocurrió entrevistar en el bloque que titularon así —el correísmo desata otra crisis diplomática— a alguien decente, la académica e investigadora Caroline Ávila, y sucedió esto.

“Hombre, eso de titular que ‘el correísmo’ es responsable de esta crisis diplomática en lugar del presidente Noboa está un poco feo…”, dice Caroline Ávila —con toda la paciencia y la educación del mundo, además—. Pues bravo por esta académica sacando los colores en directo a los periodistas corruptos de Ecuavisa.

“El correísmo desata otra crisis diplomática”. Es que te tienes que reír. Pero claro, tampoco es que esto sea una sorpresa, lamentablemente: recordemos que hablamos de los mismos medios de comunicación que recientemente, a raíz de que Ecuador se haya convertido en el país más inseguro del continente poniendo de manifiesto las nefastas consecuencias del desmantelamiento de lo público que inició la derecha ecuatoriana tras los gobiernos de Correa, dijeron que la culpa también era de Correa, que no gobierna desde hace 7 años y que tenía los mejores datos de criminalidad (en aquella etapa Ecuador era el segundo país más seguro de Sudamérica).

Los malos resultados de la derecha ecuatoriana en el presente son culpa de Correa, que tuvo los mejores resultados en el pasado. Claro que sí. Es algo así como decir que los malos resultados del Barça de Xavi son culpa de Guardiola.

Esta misma académica que puso en ridículo a Ecuavisa ha analizado también las portadas de varios periódicos ecuatorianos sobre el asalto a la embajada de México. Y su análisis muestra cómo estos periódicos —El Expreso y El Universo— enmarcan la cuestión en sus portadas, mediante la prevalencia de la imagen, de una forma justificadora del asalto, como un asunto interno, poniendo por delante algo así como “la razón nacional”.

Portada del Expreso del sábado, al día siguiente del asalto: “La relación de Ecuador y México camina sobre vidrio. Son varios los desencuentros que traen el vínculo a un punto frágil”. Fotografía: nada de asalto a la embajada.

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No lo llames asalto a una embajada violando los principios elementales de la paz regional y del derecho internacional; llámalo “varios desencuentros”.Y portada del Expreso del domingo: “La crisis diplomática que acarrea la incursión a la Embajada”. El ingreso de la fuerza pública ecuatoriana a la Embajada de México para detener a Jorge Glas, a juicio de diplomáticos, refleja el irrespeto por parte de ambos países a convenios internacionales. Se avizoran posibles consecuencias”.

No lo llames violación de una misión diplomática mexicana por parte de Ecuador; llámalo “irrespeto por parte de ambos países a convenios internacionales”.

“Por parte de ambos países”, claro que sí. La foto: la detención de Jorge Glas. Ahí es donde se quiere poner el foco.

Portada del sábado de El Universo: “Tras la decisión de México de dar el asilo a Glas, Ecuador negará el salvoconducto”. 

Y portada del domingo: “Jorge Glas está en La Roca y México protesta”. “El Gobierno dice que no podía permitir la impunidad, mientras la OEA llama al diálogo a Ecuador y México, que rompió relación tras operativo en su embajada”.

No lo llames asalto con agresiones incluidas a personal diplomático, llámalo “operativo”…

Y no busques en las portadas ninguna imagen del asalto a la embajada, que es la que ha dado la vuelta al mundo. En su lugar, otra foto: Jorge Glas siendo trasladado a la prisión conocida como La Roca, al estilo de la detención de un terrorista.

Decía Caroline Ávila en su análisis de estas portadas: “En resumen. Los medios ecuatorianos decidieron no hacer eco de la narrativa internacional y acoger la trascendencia local. Para el «ecuatoriano de a pie» están más recientes la impunidad judicial desatada en la agenda de fiscalía que la preocupación internacional. En titulares, como en los trends de TikTok, es más eficiente la foto de la captura de Glas que la indignación internacional. La responsabilidad del periodismo es enorme porque requiere sensibilidad, lectura de los tiempos e integridad. ¿La tenemos en Ecuador?”. Nada que añadir a sus palabras.

“El Gobierno no podía permitir la impunidad”, decía también El Universo en su portada. Sí, el mismo gobierno al que se le fugaron los delincuentes más peligrosos del país (Colón Pico, Fito, Luque Lecaro), razón por la cual los ecuatorianos han tenido que vivir tres meses en un estado de excepción, dice sobre Jorge Glas, víctima de lawfare, que “no podía permitir la impunidad”. Claro, Colón Pico, Fito y Luque Lecaro no eran dirigentes del correísmo…

“Gobierno actuó para evitar una fuga inminente de Jorge Glas”, tituló ayer El Telégrafo, haciendo suyo el argumentario del gobierno de Noboa. Y lo mismo de nuevo El Expreso: Infografía al estilo de una imagen de campaña electoral diseñada por el equipo del Expreso para hacer propaganda del argumentario del gobierno: “Era obligación del gobierno impedir que se produzca una impunidad”. Roberto Izurieta, secretario de comunicación. Firmado: Expreso.

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¿Quién necesita un equipo de comunicación si ya tiene trabajando para él a las principales empresas mediáticas del país? En definitiva, queridos amigos, la derecha delincuente que gobierna Ecuador tiene dos tipos de portavoces: los que llevan traje de político y los que llevan traje de periodista.


Este texto es una adaptación del análisis de Manu Levin en La Base, puedes ver el episodio completo aquí:

Madrid –

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