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Pepe Blanco justificaba el fichaje de Garzón para tener acceso a Sumar en las administraciones

Diversos empresarios y clientes de Acento informan a El Mundo de que el exministro socialista veía en Garzón la llave para beneficiarse de las posiciones de poder de Sumar

Este miércoles, Alberto Garzón renunció a su incorporación a la consultora Acento a causa de las duras críticas recibidas desde el entorno de la izquierda después de anunciar su fichaje. Según El Mundo, José Blanco, exministro socialista y consejero delegado de Acento, había informado varios días antes a empresarios sobre la incorporación del exministro de Consumo, alegando que se trataba de un movimiento estratégico para acercarse a las posiciones de Sumar. 

Una de las personas con las que contactó Blanco, asegura que el socialista consideraba que era necesario «incorporar a alguien como Garzón» debido al «poder» que tiene Sumar. Acento es un conglomerado de exdirigentes políticos de todo tipo de siglas que proporciona servicios de lobby ante diversas administraciones, por lo que el fichaje de Garzón era ideal para estrechar lazos con miembros de Sumar, que tienen presencia tanto en el Gobierno central como en diversas administraciones autonómicas y locales. 

Sin embargo, las reacciones al anuncio de la entrada de Garzón en la consultora obligaron al excoordinador de Izquierda Unida a rechazar el puesto, dejando al lobby sin conexiones con los de Sumar y en una posición de excesiva exposición pública —si tenemos en cuenta que una de las claves para este tipo de empresas es mantener un perfil bajo para poder negociar acuerdos sin vigilancia mediática—.

Las duras críticas que Garzón recibió desde sectores de la izquierda respondían a la denuncia de una práctica muy extendida en la política española, la de las «puertas giratorias». El que fuera exministro de Consumo del anterior gobierno de coalición, pretendía incorporarse a una empresa que realiza servicios de lobby para empresas como Codere, una casa de apuestas deportivas y juegos de azar. 

La renuncia de Alberto Garzón fue lamentada por Acento, que realizó un comunicado en los siguientes términos: «la propuesta respondía a nuestra apuesta por el talento, la experiencia, el conocimiento y la máxima representatividad. Respetamos su decisión y seguimos apostando por la maduración de nuestro sector, en el marco de nuestro sistema político».